Maldita rutina…

Todos sabemos que de los peores enemigo de una relación de pareja, puede ser  caer en la famosa rutina.

¿que causa la rutina?

La rutina es causa de muchísimos conflictos de pareja y de separaciones, pero si lo sabemos ¿Por qué no ponemos remedio?

Normalmente porque la confianza y la vagueza no nos dejan empezar con metas mas innovadoras y menos rutinarias. Aparentemente siempre nos cuenta empezar a emprender algún tipo de tarea distinta, por ejemplo: “hoy voy a empezar a hacer deporte o voy a coger ya ese libro que me tengo que leer…”

Pero seguidamente pensamos, ¡uf quizá mañana! o ¡luego mas tarde! y así lo vamos posponiendo cada vez más. ¡Pero hay un truquito, debemos aprender a engañar a nuestro cerebro!

Podemos empezar pensando: venga voy a coger el libro y leeré solo un par de páginas, solo lo empezaré y ya está.

Hay que "animar" al cerebro

Hay que “animar” al cerebro en pequeñas dosis para que empiece con la tarea, porque veréis que una vez puestos ya en la tarea, se os pasa el tiempo y acabáis haciendo más de lo que pensabais.

Sí, lo que realmente cuesta es ponerse y en las relaciones de pareja pasa parecido. Pensamos en hacerle un detalle, en ir a algún lugar, en emprender algún viaje juntos, en ir a visitar cierto restaurante donde queríamos cenar, en ir de excursión…pero siempre lo vamos posponiendo para más adelante, para un mañana.

Pues ¡STOP! A pesar de que el ser humano ama la rutina seguramente por una cuestión de economizar nuestro tiempo, resultando hacer más rápido todas esas tareas diarias y sin tener que estar pensando en cada uno de nuestros movimientos y en cada una de nuestras palabras ante una situación…A pesar de esto, engaña a tu cerebro y empieza con pequeños detalles que verás que se hacen muy grandes.

Cuando la rutina ya agobia, es una señal de la conciencia que nos está indicando y avisando para que abandonemos el “modo automático y rutinario” y empecemos a romper con lo cotidiano siendo mas creativos.

Algunos detalles en pareja:

– Puedes empezar por cambiar los ‘picos’ en los labios, por besos más húmedos e igualmente cortos.

– Sustituye un beso en la mejilla por un fuerte abrazo.

– Una vez hayáis empezado a hacer el amor, plantéale trasladaros a otro lugar de la casa: salón, ducha, cocina, suelo, sofá.

– Déjale una notita escrita en el espejo del baño antes de irte a trabajar, cosas como ‘que pases un buen día’ o ‘buenos días, te quiero’, ‘¿has dormido bien?’.

– Sorpréndele cuando vayáis a cenar como lo hacéis normalmente y enciende un par de velitas y déjalas sobre la mesa, es algo muy sencillo y crea un ambiente íntimo.

– Decidid seriamente en iros a pasar el día a la montaña, a un lago, a la playa…a cualquier sitio tranquilo donde podáis charlar y estar a gusto, dedicaros tiempo.

– Sorpréndele a la hora de dormir y regálate un conjunto de lencería sexy.

– ¿Cuánto tiempo hace que no lo/la recoges del trabajo? Acude allí un día e invítalo a tomar algo, por los viejos tiempos…

En definitiva...

…tienes que innovar. La sorpresa es el factor clave para combatir la rutina, y por supuesto el esfuerzo es de ambos miembros de la relación.

Estos pequeños detalles que no nos requieren si quiera mucho tiempo y esfuerzo, son detalles clave y muy óptimos para combatir nuestro día a día.

Esto hará que vuestra relación sea más apasionante y menos monótona, imprescindible para que la ilusión no decaiga.

Esto proporciona un subidón cerebral a base de endorfinas, serotonina, dopamina y en ciertas actividades adrenalina… que nos envolverá en una sensación casi mágica de confort, relajación y bienestar.

¿Qué tal si empezáis hoy?

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