Beneficios de un baño caliente

7 de septiembre de 2015 por Silvia Catalán | Posteado en Hablan expertos Factor Mujer, Silvia Catalán.

Si bien es cierto que no podemos darnos un baño cada día (por motivos ecológicos y de tiempo), dedicar una vez al mes a darnos un buen baño relajante en casa es uno de los grandes placeres que puede ofrecerte tu hogar.

Pero además de los efectos relajantes, el baño caliente puede ser un buen momento para activarte sexualmente, tanto solo/a como en pareja.

Beneficios de un baño caliente: relajación muscular

Llenas la bañera de agua caliente, no hace falta que sea muy caliente, unos 37-40º serán más que suficientes. Pones un par de velas aromáticas, apagas la luz, pones un poco de música relajante, te desnudas y te metes dentro de la bañera.

Los ojos cerrados, conectando con tu cuerpo, con las sensaciones, sintiendo como el agua envuelve todo tu cuerpo. Y te dejas llevar.

Solo con la descripción de este momento, ya puede uno notar la relajación en el cuerpo…

El agua caliente en contacto durante un rato con nuestro cuerpo produce un efecto maravilloso que es el de la relajación muscular. Ideal si quieres luchar contra una cefalea tensional, contra un dolor de espalda o contra unas piernas demasiado cansadas de haber hecho una excursión o de haber estado todo el día trabajando.

Además, si quieres mejorar tu flexibilidad, dedica unos minutos (con 10 serán suficiente) cuando salgas del baño para hacer pequeños estiramientos de brazos, piernas y espalda. Como tus músculos estarán relajados será más fácil que si lo haces “en seco”.

Beneficios de un baño caliente: añade complementos al agua

El baño caliente antes de acostarnos nos lleva a un estado de relajación que nos ayudará a conciliar el sueño. Pero si te cuesta mucho y eres de aquellas personas que sufren insomnio te recomiendo que le añadas unas gotas de aceite de lavanda al agua, o bien que aromatices el baño con incienso de esta hierba aromática que ayuda a calmarse.

Si además de relajarte quieres conseguir librarte de la congestión nasal tan habitual en invierno, te recomiendo que le añadas al baño unas gotas de aceite de menta o eucaliptus. Por efecto del vapor de agua caliente se abrirán tus fosas nasales y tendrás una experiencia refrescante y relajante a la vez.

Si quieres aprovechar el baño para hidratar tu piel puedes usar avena. Sí el cereal que venden en copos en el súper. Coge un puñado de avena y échalo en un recipiente con agua caliente. Cuélala y añade el agua resultante (que será bastante blanca) a la bañera. El sílice liberado por el agua a su paso por el cereal hará que tu piel quede rehidratada y suave, preparada para las mejores caricias. Si además, cuando salgas del baño lo complementas con un buen masaje con uno de nuestros aceites corporales, tu piel quedará más suave que nunca.

Beneficios de un baño caliente: activa tu deseo sexual

Como hemos dicho hasta ahora, el baño caliente eminentemente produce un estado de relajación física y mental, además de muchos otros beneficios.

Ese estado de relajación con nosotros mismos y con el mundo puede ser el punto de partida para una experiencia excitante y placentera como pocas.

Aprovecha el momento en el que estás sumergido/a en el baño para acariciar tu cuerpo, ya sea con tus manos o con una esponja suave (si tienes una esponja con vibración incluida, mejor ;). Puedes usar un gel de baño específico para activarte a nivel sexual, con un olor fantástico y un tacto suave y muy agradable.

Poco a poco tu cuerpo irá acompañando a tus manos y se irá relajando a medida que tu mente se activa y aparecen las fantasías más excitantes. Si tienes la suerte de tener un vibrador sumergible, puede ser un gran aliado en este momento (la mayoría de los vibradores Lelo lo son).

Además puedes optar por compartir este baño relajante con otra persona. En ese caso, además de relajaros conjuntamente (siempre y cuando la bañera tenga espacio para los dos, de lo contrario os recomiendo hacerlo en un hotel con una bañera king size… ;), podéis jugar con vuestras manos y vuestros cuerpos bajo el agua.

Al agua, además, le puedes añadir unas sales de baño afrodisiacas y muy especiales que dejarán el agua con un color azulado espectacular e inundarán el baño de aroma delicioso. Tienen también efecto hidratante sobre tu piel. ¿Qué más quieres?

¿Sabías que existe el jabón de baño afrodisíaco? Pues sí, un jabón con un olor muy estimulante que os encantará extender por vuestro cuerpo y por el del otro. Y si os quedan fuerzas después del baño, podéis complementar con cualquiera de los aceites de masaje también comestibles y con efecto calor para acabar de “relajar” vuestros cuerpos y, quién sabe si acabar en la ducha de nuevo. 😉

 



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