¿Cuándo podemos considerar que una persona es adicta al sexo? ¿Cuál es la diferencia entre lo enfermizo y lo normal?
Lo primero que tenemos que dejar claro, es que cuando una persona “normal” mantiene relaciones sexuales, lo hace desde una dimensión de placer, de goce, de disfrute… vive la situación de una manera sexualmente placentera y emocionalmente repleta de una química neurobiológica fascinante.
Por el contrario, cuando hablamos de adicción al sexo, los objetivos a los que se dirigen las relaciones sexuales cambian de forma drástica.
El adicto al sexo no busca el placer
El adicto al sexo no busca el placer, el disfrute… el adicto por el contrario, lo hace como forma de calmar un malestar, una ansiedad, lo practica como una necesidad.
El sexo actúa a nivel cerebral como si de una droga se tratase, esos cambios neurobiológicos y químicos que se experimentan, actúan y son percibidos cerebralmente al igual que cuando se consume droga.
La persona adicta al sexo busca el sexo por necesidad y no por disfrute, como si de una droga se tratase y como si de una abstinencia puramente dicha fuera; busca paliar esos síntomas.
Ya no disfruta del sexo como una maravillosa fuente de placer, sino que más bien lo utiliza para aliviar su malestar.
Además la persona es invadida por una serie de pensamientos repetitivos y constantes que culminan con la práctica incontrolable del sexo.
Esto acarrea síntomas clínicamente significativos a nivel personal, social y laboral; de forma que interviene en el tránsito normal se su vida cuotidiana. Sumado al gran vacío que sienten ante dicho trastorno.
Quizá muchos os estéis preguntando, entonces de forma normal…
¿cuántas veces se pueden mantener relaciones sexuales o masturbatorias?
No existe un número exacto de veces de relaciones sexuales o de masturbación al día, a la semana o al mes… siempre y cuando disfrutes de tus relaciones y no las utilices para aliviar malestares, o puramente por necesidad y sin poder controlar tus pensamientos ni dichos actos repetitivos.
Por último, dejar un dato estadístico que especifica que el 6% de la población es adicta al sexo y que los hombres superan en mayoría a las mujeres.