Cómo la masturbación y el orgasmo ayuda a fortalecer el suelo pélvico

El suelo pélvico es un conjunto de músculos y ligamentos que se encargan de cerrar la cavidad abdominal sosteniendo todos los órganos pélvicos (vejiga, uretra, útero, vagina y recto). Es por ello que tanto hombres como mujeres es necesario que mantengan esta musculatura firme para no tener problemas en incontinencia fecal, urinaria o prolapso de alguno de los órganos.

Siempre se habla más del suelo pélvico en mujeres y la razón es porque la mujer tiene más peso en la zona, además muchas de ellas acaban teniendo embarazado que acaban debilitando el suelo pélvico por el peso y cuestiones hormonales que afectan a la flaccidez de la musculatura. A los hombres también les afecta positivamente la masturbación y el orgasmo ya que los efectos son muy semejantes.

10 beneficios de la masturbación

Mayo, el mes de la masturbación

¿Y cómo es posible que la masturbación y el orgasmo fortalezca el suelo pélvico?

Cuando nos masturbamos hacemos que la sangre fluya por la zona genital obteniendo una respuesta por parte del cuerpo de mantener “vivos” los genitales, fortaleciendo todos los tejidos con la irrigación de la sangre. En el caso vaginal además de crecer en volumen y erectarse el clítoris (como el pene) también se lubricará.

Si tienes vagina, cuando la estés estimulando introduce uno o 2 dedos dentro y aprende a reconocer los síntomas y efectos que produce el autocomplacerse, cuando detectes que la vagina se contrae ligeramente, un suave endurecimiento del músculo, esa es es la fase previa a la llegada del orgasmo y ese es el estado que ayuda a mejorar la tonificación del suelo pélvico. Así que una vez que conozcas ese momento puedes alargar esa fase y de forma divertida y natural podrás fortalecer el suelo pélvico antes de llegar al punto de no retorno, el orgasmo. 

En el caso de tener pene es algo más complicado darse cuenta por no poder palpar la zona pero debes aprender a reconocer ese estado en el que la musculatura está ligeramente más tensa y aprender a frenar el punto de no retorno, en el que se llegará al orgasmo irremediablemente (te recordamos que la eyaculación no siempre en sinónimo de orgasmo).

Una vez llegamos al orgasmo esa “tensión” acumulada se libera en forma de espasmos involuntarios y acaba ejercitando todo el suelo pélvico.

Así que ya lo sabes: mastúrbate e intenta llegar al clímax siempre, disfruta y mejora tu tonificación muscular del suelo pélvico.

Post by Factor Mujer (mayo 2021)

Fuentes:

Imagen suelo pélvico de: OpenStax, CC BY 4.0 <https://creativecommons.org/licenses/by/4.0>, via Wikimedia Commons